La fusión de "simplicidad" y "complejidad", algo parecido es el fútbol.

25.08.2019 10:34 de  MAROGAR .   ver lecturas

“Muchos jugadores mueren en el campo de fútbol, antes de haber nacido por completo…”. (Horst Wein).

             Hace tiempo que escribí sobre el fútbol de los niños y la “simplejidad”, término que fusiona la “simplicidad” y la “complejidad”, una indagación del por qué las cosas simples se pueden volver complicadas y las complejas pueden resultar sencillas. Toda una teoría práctica de que debemos poner atención plena a las pequeñas cosas. El experto Horst Wein llega a concretar esta afirmación:“El fútbol de los niños y adolescentes no mejora con una acumulación de partidos o campeonatos, sino con el continuo desarrollo de conceptos originales que favorezcan la formación integral y crecimiento natural, sin prisas ni pausas”. 

             Se le critica en estos momentos a Zinedine Zidane que no cuenta con los jóvenes y que mantiene a los veteranos sin ningún vestigio de cambio. Es curioso, al final de la Liga 2018/19 en abril hubo una corriente periodística por la que el Real Madrid ficharía a un equipo completo y echaría a “todos los inútiles” que no lograron clasificarse por encima del tercer puesto en dicha Liga. Dichos “inútiles”, la mayoría, habían ganado cuatro “Champions League” en cinco años. Por boca de Zidane yo nunca escuché las bajas y altas que se producirían, solamente que haría cambios en los dibujos y sistemas de juego, pero la prensa acabó adjudicándole sus propios deseos de fichar y desfichar a destajo. Y, celebrados los dos primeros partidos, había contado en las alineaciones con Bale y James, dos jugadores que tan solo hace diez días iban a ser traspasados. Complejo y simple. Simple y complejo. ¿Dónde está la verdad de estas decisiones?

               En la otra acera, Valverde perdió en el campo del Athletic de Bilbao lo que permitió una crítica exacerbada, quizás injusta, y además con ausencia de Messi por lesión. En el programa de “El Chiringuito” del 19 de agosto uno de los comentaristas estuvo implacable en la crítica al entrenador barcelonista, fundamentalmente porque hizo jugar a tres jugadores jóvenes aún en formación. O sea, lo que se le critica a Z. Zidane acerca de no contar con jóvenes también sirve para que Valverde sea vilipendiado profesionalmente. ¿Cuál es la diferencia entre ambas situaciones? Sencillamente, el resultado. Tan simple. ¿Cumplió Valverde con los principios alentados por Horts Wein? Quizás el experto es muy creíble y aconseja a todos los entrenadores: “Si haces lo que has hecho siempre, no llegarás más lejos de lo que siempre has llegado”. Por hacer otro apunte, el Atlético de Madrid alineó inicialmente con ocho jugadores del pasado ejercicio. Ahora lo que ya no tiene lectura fácil es que Valverde ha citado para el partido de este domingo a un jugador de quince años, juvenil. Se ve que hizo caso a los de “El Chiringuito”…

              También insistimos en nuestro libro “Fútbol: Una pugna indescifrable” sobre la “Complejidad, o sencillez, del fútbol”. Se ve que es una de mis preocupaciones redundantes. Y me encanta esta regresión a la niñez: “El fútbol era sencillo cuando lo jugábamos en la calle. Sin reglamento; sin medidas obligatorias; sin directivos; sin periodistas; sin árbitros; sin seguidores; sin porterías ni largueros; sin entrenadores… Igual que recuerdo aquel capítulo sobre “Niños y “simplejidad” del fútbol”, en el libro “Evidencias y paradojas del fútbol”. Opiniones hay para todos los gustos: “El fútbol, en su calidad de deporte colectivo, es complejidad al 100% (Pau Marti).

             Como quiera que sea, a mí lo que me importa es la idea de simplicidad en la práctica del fútbol en el terreno de juego porque, a nivel de comentarios periodísticos y planificación de plantillas, compras, ventas, traspasos e información objetiva el fútbol cada vez más se está complicando fuera de los terrenos de juego. 

           Salamanca, 25. Agosto. 2019.