Sabiduría para generar un fútbol sencillo

21.04.2019 21:54 de MAROGAR .   ver lecturas

“La simplicidad es la clave de la verdadera elegancia”. (Coco Chanel).

            En algún momento he bebido de las enseñanzas del libro de Bruce Lee, “Pensamientos extraordinarios”, un maestro de artes marciales con una gran fuerza mental: “Un buen maestro es simplemente un catalizador”. En dicha publicación se registran numerosos pensamientos de los que cualquier entrenador de fútbol puede aprender en su gestión diaria. Al igual que los futbolistas “En la búsqueda de la verdad es necesario investigar de forma independiente, no depender del punto de vista de otra persona o de un simple libro”. (Bruce Lee). “Profunda simplicidad = sentido común”, aceptando también que “la simplicidad es difícil”, siendo evidente la dificultad para transmitirla. Porque la cultura a medio camino conduce a la ornamentación, por ello insiste en que “El verdadero refinamiento busca la simplicidad”. 

Si todas estas ideas las intentamos trasladar al mundo del fútbol, no es nada fácil concatenar la realidad con la práctica, y además ganar partidos que es lo que permite desarrollar nuevas ideas. Si no ganas no progresas en la practicidad de una táctica, de un sistema, costará mucho hacerlo tangible a los aficionados que quieren siempre un tributo inmediato: La victoria. “La simplicidad se alcanza mediante una preparación profunda”, lo que ocurre es que debemos observarlo como natural, casi espontáneo. 

Cuando ves un partido de fútbol y el balón fluye de jugador a jugador, con la resistencia tenaz de los futbolistas contrarios que tratan de interrumpir los avances, notamos esa necesidad de imponerse por un mayor acierto de los jugadores ofensivos. Otra cuestión es que los elementos que defienden aporten también su sabiduría técnica o táctica y, después de arrebatar el balón, inicien un nuevo ataque en el sentido contrario. Si después de varias acciones de ambos equipos, varias transiciones, y múltiples áreas geográficas invadidas con el balón, con apenas faltas cometidas entre unos y otros, damos por sentado que aquel fútbol nos gusta y tan solo esperamos a que los goles aparezcan y confirmen el buen espectáculo percibido que ya recibe nuestra aceptación. “Una persona simple no establece las leyes, sino que acepta lo que sucede tal como viene”. 

            Soy un enamorado de las frases hechas, imaginativas, que nos transportan luego a hechos prácticos.  “No se equivoquen: la sencillez sólo se logra a través del trabajo duro”. (Clarice Lispector). La palabra sencillez hace referencia a la ausencia de ornamentación, también podría entenderse por falta de dificultad o esfuerzo, es algo fácil de entender quizás menos de lograr. “Cuando uno es sencillo (en su habla, en sus actos, incluso en su poesía) corre el incómodo riesgo de ser tomado por tonto”. (Mario Benedetti). 

Otros que siempre tienen las ideas claras, como Einstein, señalan que “Si tu intención es describir la verdad, hazlo con sencillez y la elegancia déjasela al sastre”. Y te permite seguir reflexionando: “El pensar bien no le interesa solamente a los filósofos, sino a las personas más sencillas”. (Jaime Balmes). En los equipos creemos que solo el figura del equipo es el que tiene el mejor pensar sobre el fútbol del equipo, pero hay gente “oculta” que mantiene un liderazgo práctico y silencioso con sus compañeros, que ayuda mucho a la cohesión del grupo sin apenas reconocimiento externo. Un ejemplo muy característico fue el del actual secretario técnico del Sevilla, Monchi, ejerciendo de futbolista, nunca era titular con su equipo, pero ejercía su influencia en el banquillo colaborando con el entrenador en todos los partidos a desarrollar.

“No es nada sencillo entender lo simple”, según Eric Hoffer. Pero es excelente recurrir al que sabe para entender las mejores explicaciones.Actualmente Jordi Cruyff escribe su columna en “El País” y podemos leerle: “Mi padre siempre decía que la técnica no era cuestión de ser un malabarista con el balón, sino de llevarlo a su destino con los menos toques posibles, facilitando el movimiento de tu compañero. Ese es el sentido de su famosa frase que esta semana ha vuelto a la actualidad: “Jugar al fútbol es muy sencillo, pero jugar un fútbol sencillo es la cosa más difícil que hay”. Sus palabras no solo sirven para ilustrar la gesta del Ajax en Turín. Yo las haría extensibles a todos los semifinalistas de Champions y también al Manchester City, eliminado de la competición tras marcar cuatro goles. Todos son protagonistas con el esférico”. 

A principios de esta temporada comencé mi propia aventura para indagar sobre el “Fútbol simple”, algo de lo que hablamos y hablamos sin encontrar unos fundamentos protocolizados. Pero gracias a los que lo han practicado, o al menos pensado en su desempeño histórico, por eso es tan importante para mí este articulo de Cruyff junior: “Esa frase es una verdad como un templo, porque muchas veces complicamos el fútbol cuando en el fondo es un juego simple. Y hacerlo sencillo requiere muchas horas de trabajo en la ciudad deportiva partiendo de una idea clara. Es necesaria una identidad sobre la que gire toda la planificación de un proyecto, desde los despachos, pasando por el banquillo hasta el césped. Y eso también es una tarea completa en los tiempos que corren, con dueños o presidentes más preocupados por un retorno inmediato de su inversión que por cultivar un legado”. 

Es evidente que yo siempre busco trascendencia en las competiciones para notar que algo cambia, que algo evoluciona, que algo trasciende. Los Mundiales son un exclusivo caldo de cultivo que lo muestra cada cuatro años pero son las Ligas que ocupan una temporada completa las que dan su auténtica valía a corto plazo sobre lo que triunfa o fenece. El Real Madrid ha ganado estos años de atrás varias “Champions” y, sin embargo, se les resiste el campeonato doméstico, la Liga, ni siquiera ellos saben por qué. Ahora mismo, han llegado a semifinales de “Champions” varios equipos entre los que quedaron eliminados: Manchester City, Manchester United, Oporto y Juventus de Turín. Cualquiera de ellos podría ser ganador, tanto por modelo de juego como por calidad de sus componentes, pero la realidad es cruda. Los ganadores que jugarán las semifinales todos han quedado “retratados”. Como dice Jordi Cruyff: “El Ajax y el Tottenham son la sorpresa positiva y agradable de esta Champions. Que el Barça llegue a semifinales es normal y que el Liverpool esté entre los cuatro mejores siempre es una posibilidad. Pero el Ajax y el Tottenham están cumpliendo un sueño, haciendo sencillo algo que parece muy complicado: ganar con una identidad muy definida”. Lo que se dice, son portadores de “sabiduría futbolística”. 

Salamanca, 21 de abril de 2019.