¿Cual es el universo del fútbol? 2 de 2.

22.07.2023 00:00 de  MAROGAR .   ver lecturas

“Con Pelé, murió el fútbol más bello, el que hay que imaginar”. (Giulio Zoppello, “Esquire”)

        (…) “Mencionan el “estilo” de juego, como de tipo defensivo u ofensivo. Se dice “organización” o “sistema” o aún “el método de juego”, tratándose de la disposición de los jugadores en el terreno. Según ciertos comentaristas, el “ritmo” de juego al parecer está ligado a los tipos de pases, cortos o largos, que emplea un equipo. En resumen, nos encontramos frente a una utilización bastante confusa e irracional de conceptos provenientes de diversos campos de actividad como el militar, el empresarial, el artístico musical o el de la moda”. (…) “En fin, el “ritmo”, término extraído del ambiente musical y de la gimnasia rítmica, podría quizás figurar los pasajes de un momento de juego lento u otro rápido, como el juego argentino o inglés, o referirse diciendo “ritmo cansino” a una serie de repeticiones de acciones sin sorpresa, como sucede a menudo…”

         (…) “La progresión de la técnica del jugador se ha desarrollado en respuesta a las condicionantes tácticas, físicas y socio deportivas de cada época y lugar. Por ejemplo, en Inglaterra de 1850, el drible largo y directo era fundamental para perforar defensas limitadas a tres jugadores, en un accionar mas bien individualista. Desde 1876 los escoceses incorporan el juego de pases, desarrollando un espíritu colectivo correspondiente a las formas de vida y a la participación mayoritaria de los obreros en los equipos, haciendo así cambiar las concepciones del juego, obligando desde entonces a los jugadores a perfeccionar las combinaciones y los centros. La incorporación del profesionalismo no implicó conjuntamente ni necesariamente una mejoría en la calidad del juego. Maurice Pefferkorn, escribiendo en los años 1950, recordaba: “Los equipos amateurs continuaron jugando un Fútbol en el que el drible, la finta, el pase corto preciso, redoblado hasta el infinito, lograba el más alto grado de perfección... Para nosotros, que hemos tenido ocasión de apreciar entre los años 1907 y 1910 la calidad del Fútbol amateur inglés, tal como era concebido entonces, después de 25 años de profesionalismo, hemos conservado el recuerdo de un espectáculo eminentemente artístico”.

         (…) “Así, en todas las épocas y en todos los lugares donde este juego se practica, los nombres o sobrenombres de estas personalidades que tienen en común su disposición al juego ofensivo se han identificado a las masas, sobrepasando largamente el medio futbolístico. Entre ellos el recuerdo de Domingos, Leonidas, Pelé, Coutinho, Zizinho, Garrincha, brasileños, de Nasazzi, Andrade, Gómez, Ghiggia, Rocha y Francescoli, uruguayos, de Moreno, Pedernera, Labruna, Loustau, Sanfilippo, Di Stéfano, Sívori, Corbatta, Maradona, argentinos, de Sindelar, austriaco, de Law, Matthews, Moore, Best, Keegan, ingleses, de Puskas y Koksis, húngaros, de Valderrama y Rincón, colombianos, de Eusebio, portugués, de Beckenbauer y Rummenigge, alemanes, de Dewaquez, Fontaine, Kopa, Cantona y Platini, franceses, de Meazza, Rossi y Rivera, italianos, de Gento y Rial, españoles, de Reyes y Sánchez, mexicanos, de Milla, camerunés, de Ococha, nigeriano, de Abedi Pelé, ghanés, de Weah, liberiano, de Arellano, Toro, Moreno y Zamorano, chilenos, de Cubillas, peruano, solo por dar algunos ejemplos, han todos en sus respectivas épocas impresionado profundamente las multitudes, pues han marcado este deporte con sus capacidades de verdaderos artistas”.

          Giulio Zoppello, en Esquire, 30.12.2022, afirmó: “Con Pelé, murió el fútbol más bello, el que hay que imaginar”. Y nos detalla su pensamiento: “Pelé, de hecho una especie de transposición del concepto de David de Donatello a un campo de fútbol, representaba una perfección imposible de igualar, en una época en la que hacerlo era diez veces más difícil que hoy. Las botas, los terrenos de juego, los propios balones, la concepción de lo que era el fútbol en aquella época, iban absolutamente en contra de esa dimensión de representación universal. Lo que explica entonces por qué Pelé, a diferencia de Maradona, despertaba quizás emociones menos fuertes, menos viscerales, precisamente por la perfección titánica e inabordable que siempre representó…”

         (…) “Si Maradona sólo utilizaba el pie derecho para subir al autobús, para el brasileño en cambio era una síntesis de destreza atlética, agilidad, imaginación y plenitud aún hoy inigualable.  Y la perfección, ya se sabe, genera mucha admiración, pero apenas amor, aunque también en esto fue una excepción. En el fútbol actual, que elige a sus aseses a una edad increíblemente precoz, aún no ha surgido alguien que, como él, sea capaz de ser el mejor jugador de un Mundial con 17 años, de destacar como símbolo de excelencia en un colectivo desbordante de talento pero que, sin él, no habría logrado los éxitos que todos conocemos. Fue el 19 de junio de 1958, contra Gales, cuando se convirtió en el goleador más joven de la historia de la Copa Mundial, y sólo cinco días después marcó un triplete contra Italia en semifinales, que sigue siendo una de las actuaciones más increíbles de la historia de la competición”.

        22.Julio.2023.