Tecnología del rendimiento en fútbol

20.03.2017 09:11 de  MAROGAR .   ver lecturas

“La ignorancia puede ser curada, pero la estupidez puede ser eterna” (Matt Artson) 

            La única tecnología exigida al fútbol últimamente es la de poder dilucidar si la pelota entró en la portería, o no, queriendo ayudar al árbitro en sus decisiones. Poco bagaje si así fuera mientras que Mounir Zok, bioingeniero libanés, asegura (ElPaís,27.12.2016, Carlos Arribas) que “La tecnología del rendimiento es un proceso imparable y no predecible”. Refiriéndome al fútbol fuera de contexto “No se puede pensar en tener un éxito sin tecnología”. Aunque bien es cierto que “la tecnología solo no determina el éxito, ni la nutrición solo, ni la preparación física. Es la combinación de todas”. De nuevo el concepto “globalizado” también interviene aquí. Mounir añadió: “Ahora, con una pastilla  que toma el atleta, podemos monitorizar en tiempo real cual es la temperatura de su cuerpo. Tenemos parches que miden la calidad del sudor y lo analizan y nos dicen en tiempo real cual es su estado de hidratación” (…) “La tecnología eleva el nivel de conocimiento y el nivel de competición. Cuanto más sepamos de la actividad en tiempo real, más decisiones podemos tomar y más competitivos serán los atletas… El éxito del futuro va a ser a través de un entrenamiento inteligente basado en la calidad, no en la cantidad”.

            El entrenador del Sporting de Gijón tomó una serie de decisiones que resultaron “raras” según los cronistas, lo peor es que aunque se pase el día entero en Mareo, con jornadas de más de 12 horas, modificando detalles como la posición en los banquillos, o no dejar entrar a nadie en casetas 10 minutos antes del inicio del partido salvo jugadores y técnicos, etc. Los mal intencionados aseguran que “ha impedido rezar al cura del club”, ampliando que es un “entrenador con poca empatía, siendo difícil acercarse a él”. Incluso se critica su forma de trabajar, nunca para un entrenamiento y no hace correcciones hasta el final, los conos, las picas, las redes, los GPS, las gomas y muchos artilugios imaginables son elementos de un trabajo pormenorizado, cualitativo y cuantitativo. Al mismo tiempo cada jugador recibe informes personalizados sobre los partidos jugados y próximos a jugar, todo un bagaje instrumental… ¿El entrenador no confía en la ayuda divina porque no permite rezar antes del partido al cura del club…?

Me sorprendió agradablemente la entrevista a Jordi Montero (LaVanguardia, 10.02.2016), neurofisiólogo, experto en dolor… ”El siglo XXI es el siglo de las emociones, de las neurociencias y de las mujeres, este es el gran cambio en el que estamos inmersos”. ¿Acabaremos viendo equipos mixtos de fútbol en este siglo? “Las emociones son lo que nos gobierna, lo más importante de nuestro cerebro”. Pero no es baladí reflexionar sobre esta conclusión: “Hay estudios que demuestran que los bebés humanos que han tenido poco contacto con la madre tienen problemas en el aprendizaje”. (…) “Cuando Messi chuta, los cuádriceps de los espectadores se contraen en su cerebro. Cuando imagino el movimiento, neurológicamente estoy haciendo el movimiento… Necesitamos emocionólogos”. (…) “Estamos en un cambio de era y hay que vivir sin miedo a las emociones, clasificarlas, estudiarlas. Abordarlas desde la ciencia”. (…) “Hay que aplaudir cuando alguien llora, cuando alguien siente. No debemos reprimir las emociones, porque estamos expresando nuestra verdadera esencia. Reprimirlas es crearte problemas en tus redes neuronales”. (…) “Hay que poner las emociones en el centro de nuestras investigaciones, esta es la revolución”.

Después de su victoria en “Champions” contra Barcelona, firmaba Orfeo Suárez: “Como futbolista, a Unai le podía la responsabilidad, metabolizada en temor, en miedo. Contra eso se propuso luchar en el banquillo, algo que era, en realidad, como luchar contra una parte de sí mismo. Para generar esa confianza y seguridad necesitaba de la mentalidad y el orden”. Unai entiende ahora que “esta victoria es como una reválida que le concede la entrada en club de los “top coaches”. Con la tremenda derrota por 6-1 contra el Barcelona en el Nou Camp, al margen de actuaciones arbitrales, las dudas sobre el trabajo de Unai volvieron a aparecer… ¿La mala actuación arbitral disfrazará su mala actuación como entrenador? En (ElPais,25.febrero.2017, Ladislao J.Moñino) podemos leer: “Esta temporada, Simeone se ha enfrentado al bache de resultados y de juego más preocupante en los cinco años que lleva en el Atlético… El foco para tratar de enderezar el rumbo fue puesto por el cuerpo técnico del Atlético en los entrenamientos. La versión más convincente que el equipo está ofreciendo en los últimos partidos responde a un trabajo de perfil más técnico, con el objetivo de resolver situaciones del juego con balón y sin él que no se ejecutaban con corrección… En el plantel admiten que la otra pata en ese intento por cambiar la dinámica de resultados y de juego ha sido el incremento en las sesiones tácticas de vídeo. En varios de los entrenamientos que Simeone ha programado en las últimas semanas en el Vicente Calderón la sala de prensa fue habilitada para la visión compactada de acciones que destapaban errores defensivos. En el debe estadístico del Atlético esta temporada se encuentra el número de goles encajados. En lo que va de Liga (19) ya suma más goles en contra que en todo el campeonato pasado (18). Con más frecuencia de la habitual en un equipo considerado el mejor del mundo en defensa se han dado episodios que resquebrajaban la solidez del equipo. En el intento por volver a ser ese bloque capaz de encajonar al rival desde una presión adelantada o de imponerse en las segundas jugadas en campo contrario, el Atlético ha concedido muchos contragolpes que terminaron en gol. En ese incremento de las sesiones de vídeo se han tratado y mucho esa clase de descuidos que tanto daño le han hecho al Atlético".

En otro contexto, Diego Pablo Simeone fue preguntado por su partido 100 de la Liga en el Calderón y respondió: “Nosotros, los entrenadores, tenemos un montón de ideas y no hay muchas diferencias entre un entrenador y otro. Hay pocas, matices, maneras de contagiar… Pero lo importante son los futbolistas”.

Salamanca, 20 de marzo de 2017.