"Fútbol en la tierra de Pelé..." 7 de varios.

19.06.2014 09:26 de MAROGAR .   ver lecturas

"El que gana siempre tiene razón". (Anónimo).

         Como España perdió contra Holanda, los días de después nadie habló del “Tiki-taka”… ¡Qué casualidad…!  A priori, también se respetó bastante a la Selección, el periodismo se comportó de manera positiva; eso sí, cada medio arrimando el ascua a su sardina y queriendo hacerle a Vicente del Bosque la próxima alineación. Indirectamente, apuntaban la culpabilidad a quien no querían alinear en el próximo partido contra Chile. Es un contrasentido inevitable, por una parte comprensión pero por otra un pequeño “ajuste de cuentas” al ofrecer alternativas, seguramente de buena fe, pero inevitablemente señalando puntos débiles del anterior partido. Incluso, algún periodista “casillista” aseguró que el portero había jugado poco durante el año… De esa manera, no disculpaban todos sus fallos y “se escupía” sobre aquellos entrenadores que no lo pusieron en la Liga durante los dos últimos años. ¡Maquiavélico…!

          Contra Holanda, jugamos sin obligaciones defensivas… Iniesta  y Silva ocupaban las bandas de España pero dejaron muy libres sus zonas por donde penetraron los laterales de Holanda que evolucionaron con absoluta libertad hasta la línea de fondo. Arriba, Van Persie y Robben ocupaban todo el frente, juego libre de los puntas, ningún marcaje, nadie interrumpía su discurrir y, un detalle fundamental, Ramos y Piqué libraban los dos a la vez y ninguno encimaba al hombre más avanzado. Ambos muy separados y dando excesivas distancias en las coberturas. En general, hubo relajación defensiva lo que provocó un juego de mariposas a todos los jugadores holandeses… Pero la primera parte fue interesante para España, toque y ritmo con pocas ocasiones… Muy poco “fútbol bonito” sin embargo, hasta que comenzó el festival de Holanda de la segunda parte, una vez entraron con el empate a uno del primer tiempo. A la vista del controvertido despliegue de España (Bueno en la primera parte y muy negativo en la segunda), antes del partido contra Chile yo hacía mis reflexiones: “La Selección tiene que buscar más desborde, más penetraciones, más gol…”; “No deberíamos caer en el “Cojones, cojones, cojones”; “Ver la posibilidad del fútbol de TRES CES: Control-Compromiso-Capacidad”, como ya escribiera en “De fútbol y de hombres”; “Jugar 90 minutos, no entrar en peleas, no perder un segundo en zarandajas, no querer ganar el partido en el minuto uno”; “¡Ante la duda, coraje…! Fuerza mental, paciencia, nervios de acero, velocidad, pausa, precisión, cooperación, individualidad, colectividad…”; “Los fallos individuales pueden reproducirse, sin duda, pero también con otros jugadores. Los colectivos, también. Un equipo son 23 en un Mundial”; “A Chile no le ganaremos jugando más deprisa que ellos sino con más inteligencia, la pausa será fundamental, tener el balón y crear ocasiones…”

         Quizás con las premisas apuntadas, la alineación de España precisa de otros hombres distintos a los que jugó contra Holanda. Pero mi apuesta personal, antes del partido, era repetir equipo incorporando en la punta a Pedro por Silva… La realidad fue otra, y Vicente del Bosque optó por no alinear a Piqué y Xavi Hernández; mientras que jugaban por ellos Martínez y Pedro. El partido, inicialmente, era aceptable en España con momentos de juego controlado y alguna llegada. Sin embargo, recibimos el primer gol con desajustes defensivos en la última acción… Fue el principio del fin. Iniesta, decían, tenía que hacer de Xavi pero este es el símbolo del partido. Xavi no jugó y fue casi la renuncia a un modelo que hasta entonces había funcionado. Se está cuestionando al jugador en su continuidad con el Barça, también en fase de ruinas del modelo antiguo y creación de otro nuevo pero sin Xavi. La Selección, una vez más, copió la solución y fue una renuncia, para mí… Optamos por otro fútbol y perdimos, porque desde fuera nos creíamos que cambiando hombres pasábamos factura a ciertos jugadores que pudieron fallar contra Holanda. Y también fue un error visto después del acontecimiento.

          Ciertos programas de debate, anoche, fueron nauseabundos. Tristemente, hemos llegado a la conclusión de siempre: “Si ganas, eres bueno”. Como perdimos, “leña al mono”. De nada han servido los éxitos y las trayectorias de estos jugadores durante seis años… Llevo mucho tiempo asegurando que no existe un modelo único de fútbol refiriéndome al Barcelona y me basaba, también, en los “ejecutores de la tendencia”, futbolistas como Xavi Hernández u otros podrían agotarse y entonces tendríamos que encontrar otras fórmulas. Bueno, en este Mundial se ha precipitado todo, hemos prescindido de golpe a hombres y a modelos, Vicente del Bosque sabía lo que estaba pasando pero “el golpe a la pajarera” debía darse cuando acabase ele Campeonato. Lo que nadie pensábamos es que fuéramos eliminados con dos partidos jugados, superados por contrarios más dinámicos, y el toque con la posesión fue insuficiente… Esa es la grandeza del “fútbol bonito” que para mí tiene una globalidad que no se cubre con factores instrumentales tan solo, con herramientas parciales… Me remito al texto anterior cuando aseguraba que “Estoy hasta ahí… del “Tiki-taka”… A ver si ahora mismo lo enterramos de una vez y percibimos otra serie de virtudes y acciones de juego que deben ponerse a contribución…

          Y quería contrastar alguna otra opinión sensata. Ramón Besa (ElPais) escribe: “Ha pasado España de la diversión al sufrimiento y los rivales ajustan cuentas, porque sin velocidad “La Roja” es vulnerable”. Y reflexiona también: “Afloran de golpe solo defectos y no hay manera de rescatar ninguna virtud, ni que sea para negociar un marcador digno, quizá porque España no era un equipo convencional, aquellos que a veces ganan y otras pierden, sino que tenía una idiosincrasia admirable por singular, imposible de copiar y clonar. Nadie jugaba la pelota como la Roja. Atacaba y descansaba con el balón. El toque era rápido y preciso en horizontal y vertical, tan transparente que permitía discutir sobre su bondad, no sobre el marcador. Ocurre que con el tiempo el cuero se ha inflado hasta reventar y la selección ha quedado desnuda en el Mundial”. Por mi cuenta y riesgo, aparte estas consideraciones técnico-tácticas, he podido detectar que a pesar de los éxitos el gran público no valora que España sea un equipo, muchos aficionados siguen pensando en términos de que “son los del Barcelona” los que ganaban para España; y del mismo modo los del Real Madrid, los del Atlético, etc. Por eso, en la lucha de alineaciones, se daba por buena o mala una alineación concreta de un jugador específico en función de si el aficionado adherido al equipo España provenía de su rama principal, o sea, los equipos españoles que tienen contratados a dichos jugadores. Y así no avanzaremos en armonía… Por último, me gustaría superar el síndrome que surgirá virulentamente en las próximas fechas. Ya me gustaría que no validásemos las esencias del “fútbol carroñero”, ese que constituyen determinados personajes que “estaban esperando” a que España perdiera para criticarla (Seleccionador y jugadores) agriamente…

MAROGAR (19.junio.2014)