¡Déjate de "pamplinas", futbolista!

11.02.2019 09:50 de  MAROGAR .   ver lecturas

“La distinción entre el pasado, el presente y el futuro es solo una obstinadamente persistente ilusión”. (Albert Einstein).

          Los salmantinos conocen bien dónde encontrar “la maruja”, planta conocida como ensalada de pastores que crece en regatos y praderas, siempre en agua cristalina que discurre entre el hierbazal. Para identificarla, se manejan distintos nombres como “pamplina”, “regajos”, “linillo”, etc. Se recoge por primavera y no hay que dejarla crecer demasiado para que no se endurezca. 

           La “maruja”, o “pamplina”, aparece en las cartas de los restaurantes de Salamanca, se presenta como ensalada en un plato hondo, bien lavada, compuesta con aceite de oliva y vinagre blanco, machado de ajo, algunas veces con aceitunas negras, incluso granada, las ensaladas más complejas contienen pequeños trozos de pescado escabechado. Para mí, lo más simple, lo más auténtico, es acompañar la “pamplina” sin demasiados añadidos… 

          Otras de sus definiciones señalan que esta planta herbácea anual, además, la “pamplina” también se traduce vulgarmente por un “dicho o cosa de poca entidad, fundamento o utilidad”; incluso “pamplina” suele traducirse por ciertas “ocurrencias”, o acciones, sin demasiado fundamento. Todos los entrenadores de fútbol hemos tenido, alguna vez, “ocurrencias” que los demás entienden como “ataques de entrenador” y llegan a rebatir con la contundente expresión “¡Déjate de gilipolleces¡”; si bien es más educado que se diga: “¡Déjate de pamplinas!”… Lo que resulta menos agresivo y mejor aceptado por todos que lo acaban entendiendo fácilmente:

1.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Y entrégate a la dinámica de tu equipo sin pensar con egoísmo por tus beneficios individuales, luchando por el “bloque-equipo” y aceptando los principios generales del grupo. Si así fuera, ¿Bale se lesionaría solo con las miradas de los contrarios? 

2.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Deja de tontear con la pelota, reteniéndola, manejándola solo para tu brillo personal, el juego requiere de fluidez con la pelota progresando hacia posiciones y geografías ofensivas, bien buscando superioridades o encontrando llegadas al área contraria con el intento de golear. Isco, por su actual madurez, debería haber llegado ya a dicho convencimiento en vez de demandar más oportunidades de las que ya dispuso anteriormente, y superar el actual agujero negro en el que penetró.

3.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Cumple con las misiones asignadas, sube, baja, marca, desmarca, tira, recupera posiciones, regatea, asóciate, anima, no reproches ni a compañeros ni entrenadores, acepta tu tarea como parte de un todo indivisible en la misión colectiva, como parte alícuota de tu participación responsable al juego de equipo. Para mí no es de recibo la crítica a Lucas Vázquez, un futbolista hiper entregado, tan solo para hacer huecos a otros jugadores más lucídos pero menos resolutivos…

4.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Si tienes un contrato duradero, o estás pendiente de negociaciones, no presentes públicamente renovaciones o rectificaciones, fuera de tiempo, solo porque tu rendimiento creció y tu valor creció oportunamente, siempre según tu criterio. Porque, suele ocurrir, cuando los rendimientos decrecen nadie plantea ninguna exigencia para rebajarse el sueldo. ¿Coutinho, Dembelé, Bale, Neymar, etc.? 

5.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Tu equipo es al que tienes que rendir cuentas y entregarle tu esfuerzo, comprometer tus obligaciones fundamentales, hasta deberías renunciar a la Selección que te reclama porque no deja de ser un “derecho de pernada”, mientras que tu equipo es el que realmente te paga y al que te debes principalmente. Tiempo llevo invitando a Ramos que se dedique solo a su equipo para conservar sus energías y preservar su salud que empezará, pronto, a dar señales negativas.

6.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! El hecho de que hoy no juegues no significa que debas recurrir a la protesta pasiva, renunciando a entrenar con entusiasmo como corresponde a un profesional que, en cualquier momento, puede ser requerido a jugar con la máxima intensidad. Estamos en la era de las rotaciones lo que les da esperanzas a más jugadores para mostrar sus cualidades en el partido de fútbol y de paso preservan la salud de los futbolistas. Hasta Messi necesita rotar…

7.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Es improcedente que critiques a tu anterior entrenador, o que lo adules públicamente. Mourinho sufre este acoso generalizado a partir de su destitución en el Manchester United. Sin embargo, el otro día, Canales del Betis aseguró, ante una pregunta periodística capciosa, que aprendió mucho de Mourinho entrenador. La educación deportiva varía de enfoques, el otro día Bale ponía en duda sus relaciones con Zidane porque no le consintió partidos sin un rendimiento fiable.

8.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Suele ocurrir que, transcurridos unos determinados partidos, viene a demostrarse que los entrenadores no alinean a los futbolistas según el capricho del momento. Otros se pliegan a la presión del entorno o se echa en manos de los veteranos. En cualquier caso, la “justicia suprema” que un jugador reclama para sí es la “injusticia infinita” que propone para su compañero de equipo. Morata nunca aceptó la suplencia en el Real Madrid y, con el tiempo, acabó jugando en casa del vecino Atlético de Madrid. 

9.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Si juegas de manera habitual en tu equipo será porque aportas unas determinadas virtudes y nunca porque el entrenador trate de beneficiarte personalmente. De hecho, si tu rendimiento decrece, acabarás “jugando en el banquillo” a favor de uno de tus compañeros más productivo que tú. Es el estado de situación del lateral Reguilón en el Real Madrid que ha conseguido jugar con rendimientos importantes supliendo con éxito la baja forma de Marcelo, por otra parte, sujeto a injustas críticas generalizadas.

10.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Siempre que entrenes con fortaleza y dedicación, tendrás muchas más oportunidades de que cuenten contigo en las alineaciones, sin necesidad de implicar a tus amigos periodistas para que propaguen tus buenas virtudes. Además, deberás contribuir con tus fundamentos técnico-tácticos, con tu motivación, con tu empatía, con tus ganas de ganar, porque el equipo priva sobre la individualidad… Reconozcamos el juego actual del jugador del Betis, Sergio Canales, mostrando sus valores futbolísticos como para ser convocado por la Selección española, después de haber superado en los últimos años tres rupturas de ligamento cruzado en sus rodillas.

11.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Es verdad que los presupuestos elevados pueden favorecer la consecución de títulos en los distintos Campeonatos. Pero, bien es cierto que la adhesión a un equipo en concreto debe estar por encima de dineros, inversiones, contratos más o menos favorables, etc., El disfrute de los equipos sale de las tripas y no de otros intereses colaterales, la actitud siempre estará muy por encima del ganar o perder. 

12.- ¡Déjate de “pamplinas”, futbolista…! Hace un mes, el Real Madrid era un “equipín”, un conjunto de jugadores desgastados, un apocalipsis deportivo. Cuando el estado de forma deportiva de sus futbolistas mejoró, el equipo ganó más que antes y los demás perdieron algún punto impensado. Al 10 de febrero, el Barcelona está primero con 51 puntos; y Real Madrid segundo con 45 después de ganar en el Wanda por 1-3 a un Atlético de Madrid que se quedó con 44 puntos…

(11. Febrero. 2019).