"Coaching" futbolístico

“Somos ángeles de una sola ala, debemos abrazarnos si queremos volar”. (Anónimo)

Recién fichado por el Real Madrid, supimos del futbolista Lucas Silva que trabaja con una empresa de “coaching” deportivo, “Sport Networking”, método “Making Better Players”, pionero en entrenamientos que inciden sobre las estructuras cognitivas, coordinativas, condicionales, socio-afectivas y creativo-expresivas de los profesionales. “Lucas Silva es muy inteligente y humilde, siempre tiene ganas de seguir mejorando”. Al parecer, Lucas trabajó con tres entrenadores personales: Uno, especializado en fundamentos básicos por demarcación y por línea. Otro, experto en la gestión de espacios. Y un tercero que se encargó de la planificación de los entrenamientos: “Qué tengo que entrenar, por qué lo tengo que entrenar y cuándo lo tengo que entrenar”, filosofía del encargado de coordinar todo el trabajo realizado por el jugador. ¿Entrarían en conflicto estas acciones formativas con las que ejecutan los responsables técnicos del Real Madrid? Es de suponer que se complementen… Al parecer, se hizo una radiografía perfecta del mediocentro brasileño: comportamiento táctico en el terreno de juego, virtudes, aspectos a potenciar y elementos a eliminar…

La empresa visionó cuatro partidos de Lucas en el Cruzeiro y diseccionó todos y cada uno de sus movimientos. Más de 60 horas de trabajo que descubrieron todas las virtudes y errores del jugador. “Técnicamente es bueno, tiene pase largo… lo reúne todo para triunfar en el Real Madrid”. (…) “El aspecto cognitivo del jugador está poco desarrollado en el fútbol y nosotros, con este primer informe, ayudamos al futbolista a conocer sus virtudes y errores. Es un paso muy importante. Y a partir de ahí, a potenciar lo bueno y eliminar lo malo”. Sus “coach” descubren que hay más de 200 fundamentos tácticos del juego, la mayoría de ellos desconocidos por los jugadores. Cuando Lucas Silva recibió el primer informe, tomó nota y pulió el mayor número posible de fundamentos. Al término de cada encuentro, el brasileño recibe en su “e-mail” un nuevo informe plagado de vídeos y anotaciones con más aspectos a mejorar. Y al fin de cada mes, una “masterclass” (clase magistral), que es la que mejor define a Lucas.

Hay muchos entrenadores simplistas que determinadas situaciones no las entrenan cuando gestionan a nivel profesional, no las corrigen, rindes o no rindes, cumples o no cumples, te alineo o no te alineo… Por otra parte, un futbolista de nivel no suele tener la empatía suficiente como para aceptar correcciones de otros, ni siquiera de su entrenador, recuerdo a Mourinho que exigía a Cristiano defendiera retrocediendo a cubrir una zona defensiva y el futbolista se cabreó… En estos casos, o similares, los periodistas tienen un dicho muy poco cooperativo, que utilizan en muchísimas ocasiones: “Que corran otros…”, liberando del esfuerzo a Messi, Cristiano, Zidane, Rivaldo, Ronaldinho, etcétera.

  Y nos siguen ilustrando sobre el “coaching” de Lucas Silva: “Hacemos una sesión por videoconferencia cada cuatro partidos, porque ya se puede ver una evolución. Y con Lucas duraban cuatro o cinco horas, cuando lo normal es que duren dos. Aquí vemos las ganas de mejorar que tiene, no para de hacer preguntas”. En estas sesiones, el jugador llega a repasar más de 60 cortes de vídeos suyos y de otros jugadores que actúan en su misma posición, visiona gráficos y va resolviendo problemas que le plantean sus entrenadores: “Es lo que llamamos descubrimiento guiado, llegar a la solución a través de preguntas. Por qué aquí debes hacer un apoyo en profundidad o en amplitud, por qué cambiaste el juego de lado si había esta otra opción…” (…) Es un jugador muy colectivo, trabaja muy bien con las líneas de ataque y defensa”. Sin duda, el futbolista tiene obsesión por mejorar… Viendo vídeos entrena de manera inconsciente bajo lo que sus entrenadores denominan neuronas espejo: “Cuando un jugador se observa en un vídeo y ve ese fundamento en otro que tiene mucha más experiencia que él y que ha sido uno de los mejores futbolistas del mundo, lo que le permite es entrenar inconscientemente de manera cognitiva. Primero lo ve con jugadores como Xavi o Kroos y luego lo ve aplicado en su mismo partido. Cuando llegan al campo, de manera natural, resuelven infinitas situaciones del partido de manera inteligentísima. En Lucas, la mejoría es clara”. Desde “Sport Networking” están convencidos de que Lucas “se va a adaptar muy bien, porque es un jugador muy europeo. No va a tener problemas de acoplamiento con Kroos y Modric, y el resto de jugadores”. Tampoco dudan en enumerar algunas de sus cualidades: ”Tiene técnica, muy buen toque de balón, pase en largo… Se coloca muy bien en el campo, mide bien los esfuerzos, ve y ejecuta bien los espacios, da equilibrio al equipo… Para los entrenadores es un lujo, porque es muy regular”.

En Portugal sigue ganando el Benfica de Lisboa esta temporada. Pero al norte, en Oporto, Lopetegui trata de ordenar las ideas de su equipo aún muy joven, como en su etapa de Seleccionador de jóvenes con España. Por supuesto, quiere controlar los partidos mediante la posesión pero también aporta otras informaciones para ilustrar a los suyos. “Se da por hecho que los jugadores entienden el juego y no es así”, dice Julen con toda la razón del mundo. Yo ampliaría que muchos entrenadores tienen también bastantes lagunas al respecto.  Pero es que esta labor del Oporto la quieren realizar con jugadores que muchos no eran titulares en sus propios equipos de procedencia. En la fase de grupos de la “Champions” el equipo acabó primero con 14 puntos, 16 goles a favor y cuatro en contra. Solo Chelsea, Bayern, Barça y R.Madrid están por encima de esos registros. “Yo quiero que mi equipo sepa hacer todo bien. Esto te lleva a querer atacar y defender cada vez mejor. Para eso busco que los chicos sean capaces de entender el juego”. Y reconoce Lopetegui algo que nos pasó a todos aunque nos cuesta reconocerlo: “Creo que cuando juegas entiendes muy poco. Y me incluyo. No es fácil dar soluciones diferentes a diferentes dificultades. La riqueza de tu equipo depende de las soluciones que sepan dar tus futbolistas”. Y remata Julen Lopetegui: “Cuando se presenta la situación del partido que has simulado en la práctica, se desencadena la respuesta automatizada. Intentamos automatizar movimientos, pero la línea es muy delgada y si te pasas puedes matar la creatividad… La toma de decisiones no es un derecho, es una exigencia”. Julen actúa como entrenador pero también como un “coach” de sus jugadores…

Siendo yo entrenador de futbolistas jóvenes, siempre les repetía: “Os tiene que doler la cabeza más que las piernas”. Por aquello de que debían pensar en el juego, entenderlo, para mí era más importante el conocimiento del fútbol que otras facetas. En “Coaching Mental” de Joaquín Pereira podemos ilustrarnos en un momento social que también critico: “Hace falta entrenamiento psicológico para soportar la presión de cada día, las adversidades, la duda, los temores, los complejos y superar, contra todo pronóstico, tus propias debilidades físicas y psicológicas”. (…) “El éxito sin esfuerzo se ha convertido en el cuento de hadas de nuestro tiempo…” (…) “Desear obtener un gran logro sin esfuerzo es una patología, una moderna superstición, y la gente va por ahí creyendo en esa presunta magia de “atraer” lo que piensa, porque muchos, cada vez más, huyen de todo esfuerzo como de la peste”. (…) “Las personas cada vez soportan menos la frustración, cada vez toleran hacer menos esfuerzo por conseguir algo. La gente ha dejado de pensar que con esfuerzo, voluntad y persistencia se consiguen las mejores cosas y prefiere aguardar a que se lo resuelvan…” Estas reflexiones parecen fundamentales para superar el estado actual de situación… Y los clubes debieran valorar mucho más a un entrenador-“coach” que a un mero alineador…

Salamanca, 12 de febrero de 2015.